El Estado y la Nación en quiebra

Es tradición que el Banco de España publique por estas fechas el Informe Anual sobre la Economía Española, introducido por una nota del Gobernador, de mayor calado político que el resto del documento, elaborado por el Servicio de Estudios de la institución. Les recomiendo su lectura, si no del documento completo, al menos de la presentación del Gobernador, Luis M. Linde. En este Informe, a modo de testamento, aprovecha para decir cosas que durante sus seis años de gobernanza, no se atrevió a decirle al gobierno.


La gestión de Linde al frente del BdeE no es santo de mi devoción. Se ha callado bastante frente a atropellos y " marranadas" llevadas a cabo por algunas instituciones financieras, además de haberse plegado a los dictados del gobierno en no pocas ocasiones. La independencia del BdeE bajo su mandato deja bastante que desear.

Claro, que quien nombra al Gobernador es el Gobierno y donde hay patrón no suele mandar marinero. Yo tengo que remontarme a los años 60 del siglo pasado, que a pesar del pleno régimen del general Franco, para encontrarme con gobernadores bastante más imparciales que los más recientes. Incluso, mi profesor el gobernador Luis A. Rojo Duque, de feliz memoria para mi, prestó algún favor a los gobiernos de Felipe González.

La quiebra del Estado es la quiebra del Estado del Bienestar

Linde viene a decirnos que si no quiebra el Estado en términos formales por lo que se entiende quiebra en Economía, si va camino de quebrar el estado del bienestar. Dice el Gobernador:

 Elevado nivel de deuda pública 

 ...  a pesar de los avances anteriores, los progresos son todavía limitados en otros ámbitos —de forma notable, en el terreno de la reducción del elevado nivel de deuda pública—, lo que hace que, en el medio plazo, la economía española continúe presentando un grado notable de vulnerabilidad ante posibles perturbaciones, especialmente en un contexto en el que cabe esperar que las políticas de demanda proporcionen un estímulo cada vez menor al crecimiento. Los desafíos son, si cabe, más importantes en un horizonte temporal más dilatado, en el que las políticas estructurales deben desempeñar un papel más activo para asegurar un aumento sostenido de la capacidad de crecimiento de nuestra economía y de los niveles de bienestar.

El pernicioso envejecimiento poblacional 

El envejecimiento poblacional supone un reto de primer orden para la sostenibilidad de las finanzas públicas. Las estimaciones más recientes del impacto de este fenómeno sobre el gasto público en pensiones, sanidad y cuidados de larga duración muestran que generaría un incremento del gasto en las próximas tres décadas, con un máximo de en torno a 3,5 puntos del PIB hacia 2050.
.....  En ausencia de aumentos adicionales de los ingresos, el ajuste se produciría principalmente
a través de una disminución de la tasa de sustitución de las pensiones públicas, cuyo descenso podría alcanzar los 20 pp entre 2013 y 2060.

Pensiones insostenibles 

en cuanto al sistema de pensiones, que parte de una situación inicial deficitaria y se verá presionado por el efecto del envejecimiento de la población, se hace deseable una estrategia de reforma que aumente la transparencia del sistema, refuerce la relación entre las contribuciones y las prestaciones, y, en especial, mantenga un mecanismo de ajuste automático que garantice su sostenibilidad.

El crecimiento esperable a largo plazo no garantiza el Estado del Bienestar actual 

 Desde una perspectiva de más largo plazo, resulta ineludible, al objeto de elevar los niveles de bienestar, aumentar la tasa de crecimiento potencial, que, según las estimaciones disponibles, es algo inferior al 1,5%. Las causas que limitan el crecimiento de largo plazo son diversas, afectando negativamente al grado de utilización del factor trabajo, al nivel de productividad, o a ambos simultáneamente. Las trabas al crecimiento más estrechamente relacionadas con el bajo nivel de utilización del factor trabajo incluyen el elevado desempleo estructural y el envejecimiento de la población, que, entre otros efectos, limita la tasa de actividad.

En resúmen,

• La economía española no puede soportar el coste creciente de una sociedad envejecida. 
• Habrá que recurrir, no sólo a las cuotas sociales y al IRPF, sino a todo tipo de impuestos (también el IVA), para pagar pagar mensualmente a los nueve millones de jubilados.
• El pago de las pensiones no depende exclusivamente del pleno empleo, como afirman los políticos.
• La deuda ha alcanzado una dimensión que dinamita la economía de forma perpetua. 
• El gobernador dice en un lenguaje políticamente correcto de que son necesarias más reformas, para explicar que las actuales prestaciones públicas, también en Sanidad o Educación, no pueden mantenerse y que tendrán que reducirse.
• Que el gasto de las Autonomías supone el 40% del gasto público total y que es necesario corregir los despilfarros inútiles productiva y socialmente.

La quiebra de la Nación

Puede resultar un tanto duro el título del mapa adjunto, pero la realidad es que revertir la situación actual y lo que es peor hacia dónde nos dirigimos, deja muy pocas esperanzas de que la Nación Española no se rompa.

La quiebra de la Nación no es de ahora. Viene de 40 años atrás en que se cometieron gravísimos errores que ahora muestran sus resultados.

Inventado el estado de las autonomías, que podía haber consistido en un estado descentralizado, se optó por esto y también por una descentralización política, sin parangón en ningún país del orbe. Se sentaron entonces las bases para los secesionismos que hoy están muy consolidados  en dos regiones y en proceso avanzado en otras cuatro.

Creían  los posfranquistas, comunistas y unos renacidos socialistas que a los nacionalismos se les contentaba con el llamado estado de las autonomías. Nada más equivocado: los nacionalismos son insaciables y sólo les satisface una independencia ad hoc, es decir, que la paguen aquellos de los que se secesionan. Esto es lo que han hecho TODOS los gobiernos del 78 acá.

Ahora se llaman a andanas y ponen el grito en el cielo con la boca chica peperos y socialistas. Nada hacen unos y otros, nada han hecho en el pasado. ¿Olvida el PP lo que Feijóo ha hecho en Galicia consisntiendo y promoviendo una enseñanza en exclusividad en gallego como lengua vehicular y dando alas al cada vez más en auge secesionismo gallego?

¿Olvida Sánchez cuando pide ahora en la revelación sufrida camino de Damasco medidas serias para el secesionismo catalán, que gobierna en Valencia y Baleares, donde se imponen no ya el valenciano y balear sino el catalán y gobierna con secesionistas pan-catalanistas? Donde se prohíben las enseñas del Estado y se obliga a hablar estas lenguas para poder trabajar en cualquier administración pública?

Ni se hace nada para neutralizar a los secesionismos montaraces, ni se quiere hacer nada, porque no existe voluntad política. La Nación si no está ya quebrada, va camino de ello. Es só cuestión de tiempo.
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( * )    Una unidad económica se halla en situación o estado de quiebra cuando, siendo su activo real inferior al pasivo exigible, sobresee en el pago de sus obligaciones corrientes. La cesación de pagos es un síntoma o indicio tanto de la quiebra como de la suspensión de pagos; la diferencia entre una y otra situación de insolvencia radica en el signo del valor del neto patrimonial (diferencia entre activo y pasivo): suspensión de pagos si es positivo y quiebra cuando dicha masa patrimonial arroja un valor negativo.
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