El nuevo gobernador del Banco de España, no se fía del nuevo gobierno

Como es habitual en el Banco emisor, cada trimestre se hacen públicas las previsiones económicas elaboradas por el Servicio de Estudios, que reflejan la posición del Gobernador y el Banco respecto de la actividad económica y un marco más desde el que se formulan los peros o alabanzas al gobierno de turno.
https://www.bde.es/bde/es/secciones/prensa/notas/Briefing_notes/#x067d


Estos son los riesgos que el Gobernador Pablo Hernández de Cos estima amenazan a la economía española para la que no se esperan buenos augurios, tal como ya adelantó hace unas semanas El Economista del Antifaz.

Los riesgos en torno al escenario central de crecimiento del PIB se inclinan a la baja.
En la esfera exterior, no se descarta el posible surgimiento de tensiones financieras
asociadas a un repunte de la incertidumbre geopolítica o al proceso de normalización de
las políticas monetarias, en particular en Estados Unidos. Asimismo, una eventual escalada en la adopción de medidas proteccionistas podría afectar al dinamismo del comercio y la actividad a nivel global e impactar negativamente en la economía española, cuyas exportaciones se han erigido como palanca del crecimiento a lo largo de la recuperación. 

En el plano interno, la actual fragmentación parlamentaria podría dificultar la
implementación de reformas estructurales y aminorar el ritmo del proceso de reducción del endeudamiento público, lo que podría ocasionar efectos adversos sobre la confianza de los
agentes. Además, no se excluye la posibilidad de un hipotético repunte de la incertidumbre
relacionada con la situación política en Cataluña.

Cifra el Gobernador en dos las principales amenazas provenientes del exterior: por un lado en las turbulencias financieras, y, dos, en las políticas proteccionistas de Trump que pueden amenazar las exportaciones españolas, hasta ahora motor muy importante del crecimiento de nuestro PIB.

A estas dos, añadiría yo el previsible desestimiento del Banco Central Europeo de seguir succionando deuda de los países con mayor nivel de deuda y una también previsible subida de los tipos, ambos extremos de resultados letales sobre nuestra economía, si bien el Gobernador del BCE ha dicho que nada cambiará, al menos, en este año 2018. Luego, Dios dirá.

En el plano interno, ojo a lo que dice el Banco de España: 1)  que P. Sánchez no tiene mayoría parlamentaria para llevar a cabo reformas de calado; 2)  que va a tener muy difícil poder reducir el déficit público, lo que supondría volver a las andadas de Zapatero y tener que acudir al recurso al endeudamiento; por tanto la pérdida de confianza de los agentes económicos y 3)   la incertidumbre de la situación política en Cataluña, que Sánchez puede complicar todavía más.

En resúmen: un cóctel explosivo