28-A: Sánchez, vista a la derecha, ¡ar!

No nos equivoquemos, Sánchez, visto lo visto, ha dado por finiquitada la alianza con los neocomunistas y los secesionistas, porque sabe que una muy buena parte de los electores no le perdonan esta felonía y  le van a pasar factura en las urnas.


Realmente donde tiene puesta la vista este jóven, inculto, plagiador y megalómano para estas elecciones y un posible futuro de gobierno es en la neo izquierda socialdemócrata camuflada de Ciudadanos, mal llamado centrismo. Estuvieron a punto de llevar a cabo esta unión en las elecciones pasadas, en que firmaron un acuerdo programático de tropecientos mil puntos.

La estrategia que ahora le dicta su gurú de la Moncloa es que se haga pasar él mismo por el centro. A su izquierda esos independentistas asilvestrados y unos neo comunistas a la baja a los que les puede arrebatar votos y a su derecha, una derecha cavernícola y extrema. Y a ver si el 28-A cuela.

Y Rivera, ese pollo descabezado que va de un sitio a otros según el minuto y resultado, que se siente incómodo con un Pablo que ya no es de la cuerda de un Mariano, que estaba igual de descabezado que él, y mucho menos con Abascal, contra el que haciendo aspavientos y menosprecios quiere apañar algún voto.

Que nadie eche a volar las campanas de que nos hemos quitado a este traidor de enmedio, porque las probabilidades de que vuelva son muchas, por no decir casi todas. Solo le hace falta que, de acuerdo con sus barones, como le han pedido, eche vista a la derecha y se alíe con otro zascandil como él.