lunes, 1 de abril de 2019

Como buitres carroñeros

Con perdón de los buitres que son unas aves majestuosas surcando nuestros aires. Pero, no se por qué les hemos cargado con el sambenito de llamarles carroñeros, cuando carroñeros somos todos, en definitiva. Pero, unos más que otros.


Los carroñeros de verdad, en el peor sentido de la palabra son la gran mayoría de los políticos, a los que les ha faltado tiempo para, hecho el ojeo, posarse sobre donde aventaban víctimas propiciatorias de las que alimentar su gaznate insaciable.

Esta mañana se celebró en Madrid la gran manifestación de las gentes de la España vaciada después de estar callados decenios y decenios sin que nadie les hiciese ni puñetero caso. Allí estaban ellos, con su inmenso cuajo y su desvergüenza manifestándose ante no se sabe bien quién.

¿Ante quién se manifestaban estos desgarrapatas y tuerce botas? Será ante ellos mismos ya que en la multitudinaria manifestación estaban tanto los que nos gobernaron, como los que ahora nos gobiernan. Vaya cuajo y vaya jeta.

Otean y olfatean sangre fresca. Es decir, voto fresco y se aprestan todos a figurar y prometer creyendo que somos imbécile, como prometieron sobre lo mismo antaño y, si te he visto no me acuerdo. Cuando eran dos partidos los que se repartían el bacalao, ni puñetero caso, porque sus votos no eran importantes. Ahora que la partitocracia parió nuevos partidos, sus votos valen oro molido y estos partidos carroñeros intentan apropiárselos.

Son pura basura.

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